Con este plan marco, desde la Junta de Extremadura, se define un modelo de desarrollo empresarial sólido y competitivo para la economía extremeña, integrando las líneas de acción a implementar desde la Administración Regional en los próximos años. En esta estrategia se encuentran implicados todos los elementos que vertebran la economía regional, tanto desde las distintas administraciones, los agentes económicos y sociales, como desde las empresas, Universidad, centros de formación profesional y demás segmentos de la estructura económica que, con una planificación adecuada, pueden lograr que Extremadura cuente con un tejido empresarial avanzando en competitividad, en investigación e innovación de productos y procesos, en internacionalización, con una notable mejora de posición de sus productos en las cadenas de valor global y cooperando con otras empresas para realizar proyectos en común.