Esta guía va dirigida a todos aquellos empresarios y empresarias que tienen la necesidad de pensar en el relevo de sus empresas y que, con independencia del estadio temporal en el que se encuentre su vida profesional, han tomado la decisión de abordar este proceso tan comprometido para las empresas.
A través de diferentes experiencias contadas en la guía, procuramos dar respuesta a preguntas complejas como, ¿Cuándo debo empezar con mi relevo?, ¿Cómo debo organizarme?, ¿Transmito todo o me reservo una parte?, ¿Qué debo de transmitir y a quién?…

Antes de comenzar, ¿en qué etapa del ciclo de vida se encuentran tu empresa y tu familia?

Todas las organizaciones, como todos los organismos vivos, tienen un ciclo de vida y experimentan patrones de comportamiento muy predecibles y repetitivos a medida que crecen y se desarrollan.

En cada nueva etapa de desarrollo, toda organización se enfrenta a un conjunto único de desafíos. La gestión de estos desafíos y la transición de una etapa a la siguiente tiene un impacto significativo en el éxito o el fracaso de la organización.

El conocimiento del camino a seguir, el consenso con los implicados, la planificación de los cambios y su liderazgo, se convierten en pasos imprescindibles para asegurar la continuidad del proyecto empresarial, aunque suponga que determinadas personas sean reemplazadas para superar cada una de las etapas.

Cómo, cuándo y con quién

Cuando el fundador se pregunta ¿a quién le dejo mi empresa? ¿quién la gestionará cuando yo no lo pueda asumir? se inicia el proceso de relevo. A partir de ahí podemos abordar la continuidad empresarial a través de diferentes caminos que van asociados a herramientas de planificación que facilitan la transición:

• Protocolo de empresa familiar. Contempla las voluntades del fundador, los acuerdos entre los miembros de la familia propietaria implicados, se diseña el proceso de relevo y la planificación temporal de su desarrollo, la integración de todos los actores en el día a día de la empresa y de sus trabajadores. A todo ello habrá que sumar un punto especialmente importante, la forma de resolver los conflictos y discrepancias que surjan en dicho proceso.
• Plan de relevo. Para preparar y planificar el relevo empresarial a trabajadores y/o directivos de la empresa, que no tengan relación familiar con el titular de esta.
• Plan de venta. Para planificar la transferencia del negocio a un tercero interesado, identificando el valor, los plazos y requisitos del proceso de compra venta.

Para un proceso de relevo exitoso, todas las alternativas deben ser previstas con tiempo, de manera que la empresa y sus estructuras puedan prepararse para el cambio y evitar poner en peligro su continuidad.

Si tienes interés en la continuidad de tu negocio, no esperes hasta el último día, comienza hoy reflexionando con estas preguntas: ¿Estoy preparado para entregar el relevo? ¿Está preparada mi empresa para asumir un proceso de relevo? ¿Y mi familia? ¿Conozco el trabajo a realizar para tener éxito en el proceso de relevo?